Si estás por desarrollar tu propia marca, emprendimiento, tienda online o producto, es necesario que tengas un cliente ideal o buyer persona previamente definido.
Un buyer persona es aquel cliente que, sin pensarlo, comprará tu producto o, al menos, mostrará interés por lo que ofreces. Es una forma de representar, o tener una imagen que se asemeje al máximo a tu cliente ideal.
Esa representación se construye a partir de su comportamiento, actividades realizadas día a día, aspiraciones, motivaciones, clase social, nivel económico, edad y demás información demográfica.
En otras palabras, es ponerles una cara a nuestros posibles clientes, saber qué necesitan de nosotros y qué tenemos para ofrecerles. Aun teniendo en cuenta que sus gustos e intereses pueden variar.
Lo importarte de crear una imagen lo más semejante posible a tu cliente ideal es que, así te aseguras de que tus estrategias y campañas estén dirigidas a las personas correctas. Vamos a ver cómo crear a tu Buyer Persona.
1. Investiga a tu audiencia
Si no sabes quién es tu público o a quién te diriges, será imposible que les llegues. Recopila toda la información demográfica que puedas de tus actuales clientes para comenzar a construir un perfil: dónde trabaja, cuál es su puesto, qué decisiones debe tomar, qué estudios ha realizado, si planea seguir sus estudios, etc.
También podrías enviar encuestas a sus correos electrónicos y utilizar herramientas de análisis en tus redes sociales. Son realmente útiles para conocer a quiénes interactúan con tus cuentas, aunque no sean clientes todavía.
Por último, podrías investigar con quién interactúa tu competencia. Es posible que sus clientes también sean los tuyos.
2. Define cuáles son sus necesidades y objetivos
Una vez que tienes la información demográfica de tu audiencia, es necesario que conozcas los problemas que están intentando resolver o lo que les impide alcanzar sus metas.
En cuanto a sus objetivos, pregúntate qué es lo que motiva a tus clientes a adquirir un producto. Se trata de conocer más a fondo a tu cliente. No importa si sus objetivos no se relacionan con las características que ofrece tu producto.
De hecho, esta información podría ayudarte a crear una campaña o darte una idea del enfoque o tono que debes darle a esta.
3. Identifica cómo puedes ayudarlos
Ahora debes identificar qué es lo que ofrece tu producto o servicio que pueda ayudarlos a solventar sus necesidades y alcanzar sus metas u objetivos.
No se trata de las características o de lo que tu producto hace. Se trata de pensar en los beneficios que ofreces como marca y en cómo mejoras la calidad de vida de tus clientes. Esto te dará la base que necesitas para darle forma a tus campañas de marketing.
4. Recopila toda la información y dale vida a tu Buyer Persona
Reúne toda la información obtenida en los pasos anteriores y agrupa todas aquellas características comunes. Esa será la base de tus Buyer Personas.
Vamos con un ejemplo de buyer persona
Supongamos que tu grupo principal de clientes son mujeres de 30 años, amantes del running y les gusta estar al tanto de las nuevas tendencias de moda.
Esas características las usarás para darle un nombre y una cara a tu Buyer Persona. Crea una persona con la que puedas conversar e identificarte.
Tu Buyer Persona podría llamarse María Fashion, tiene 32 años, vive en Madrid, trabaja en una empresa de moda, le gusta salir a trotar todos los días y así.
Por supuesto, no todas las personas van a coincidir con tu Buyer Persona. Sin embargo, esto te ayudará a pensar en ellos como una persona real, en lugar de una simple lista de características.